
Como probablemente sabes, durante el embarazo tu cuerpo pasa por muchos cambios y necesita muchos nutrientes. Que no necesariamente tenemos en stock. Y a veces, esta deficiencia nutricional puede provocar anemia gestacional, una afección común en las mujeres embarazadas. ¿Pero qué es exactamente? ¿De dónde viene y cómo podemos evitarlo? En este artículo te contamos cómo reconocer la anemia, diagnosticarla, tratarla… ¡Y sobre todo, cómo prevenirla con una dieta variada!
¿Qué es la anemia del embarazo?
La anemia del embarazo es una afección que suele aparecer hacia el final del segundo trimestre o principios del tercer trimestre del embarazo. Según la OMS , afecta aproximadamente al 37% de las mujeres embarazadas en todo el mundo.
En caso de anemia, el nivel de hemoglobina en la sangre es insuficiente para transportar el oxígeno que necesita el cuerpo de la embarazada y el de su bebé. Los glóbulos rojos, que contienen hemoglobina, desempeñan un papel importante en el transporte de oxígeno desde los pulmones a los órganos. La hemoglobina, compuesta de hierro, es esencial para este proceso. Cuando estás embarazada, tus necesidades de hierro, vitamina B12 y ácido fólico aumentan considerablemente para satisfacer la alta demanda de tu cuerpo y la de tu hijo.
Sin embargo, si tu dieta no aporta cantidades suficientes de estos nutrientes, o si tu cuerpo no puede absorberlos adecuadamente, puedes desarrollar una deficiencia de hierro, y en consecuencia anemia.
Con menor frecuencia (pero sucede), la anemia puede aparecer después de una pérdida de sangre importante, como por ejemplo después de un parto con riesgo de hemorragia.
Síntomas de anemia durante el embarazo
Los síntomas de anemia en la mujer embarazada pueden ser sutiles y a menudo se confunden con los cambios clásicos del embarazo. Sin embargo, si tiene anemia y no se trata, puede provocar complicaciones para usted y su bebé. Estos son los signos más comunes:
- fatiga persistente;
- una debilidad general;
- mareos o aturdimiento frecuentes;
- palidez notable de la piel (especialmente en la cara y las manos)
- dolores de cabeza;
- zumbido en los oídos;
- un aumento en la frecuencia cardíaca.
También puede experimentar dificultad para respirar, incluso con actividades ligeras. La anemia también puede provocar irritabilidad significativa y dificultad para concentrarse. ¡En resumen, un montón de señales que hay que escuchar!
¿Quiere saber si tiene deficiencia de hierro? Nuestro artículo Deficiencia de hierro: síntomas, efectos y tratamiento puede interesarle.
Diagnóstico de anemia durante el embarazo
La anemia del embarazo se puede detectar en mujeres embarazadas a través de un análisis de sangre, en particular un hemograma completo. Mide el nivel de hemoglobina en los glóbulos rojos. Si queda:
- menos de 11 g/dL en el 1er trimestre y 3er trimestre;
- menos de 10,5 g/dl en el segundo trimestre…
...Se confirma anemia ferropénica. Si este es el caso, es posible que le soliciten realizarse análisis de sangre adicionales para identificar la causa específica, como:
- nivel de ferritina (para evaluar las reservas de hierro);
- una prueba para evaluar la deficiencia de vitamina B12;
- otro para detectar una deficiencia de vitamina B9 (o ácido fólico).
En cualquier caso, cuanto antes se realice el diagnóstico de anemia en una mujer embarazada, más rápidamente podrá beneficiarse del tratamiento.
¿Cómo tratar la anemia en embarazadas?
Enfoques médicos para el tratamiento de la anemia del embarazo
Para tratar la anemia gestacional en mujeres embarazadas, los médicos a menudo recetan un suplemento de hierro para aumentar los niveles de hemoglobina y compensar la deficiencia de ácido fólico. Se recomienda tomarlo por la noche antes de las comidas, lejos de otros suplementos como, por ejemplo , las vitaminas para el embarazo .
Si los suplementos orales no son suficientes, su profesional de la salud puede agregar inyecciones de hierro. En casos de anemia grave, incluso se pueden considerar transfusiones de sangre para estabilizar rápidamente los niveles de hemoglobina.
Prevención y tratamiento de la deficiencia de hierro
Pero tened por seguro que la deficiencia de hierro no es sistemática en las mujeres embarazadas. Y también se puede prevenir durante el embarazo mediante una buena alimentación.
Para aumentar sus niveles de hierro y ácido fólico, puede adoptar una dieta rica en hierro hemo (= presente en productos animales), como:
- carne roja;
- el pescado;
- aves de corral.
¿Eres vegetariano? ¡No entrar en pánico! También puedes prevenir la deficiencia de hierro con alimentos ricos en hierro como:
- lentejas;
- espinaca;
- yema;
- frutos secos;
- granos integrales.
En cualquier caso, para favorecer una mejor absorción del hierro, procura combinar estos alimentos con fuentes de vitamina C. Por el contrario, evita los inhibidores de la absorción durante las comidas (como el té y el café).
Como habrás comprendido, la anemia gestacional sigue siendo una condición recurrente en las mujeres embarazadas. ¡Pero no es inevitable! Se trata de un tratamiento fácil y natural. Y también puedes prevenirlo fácilmente añadiendo a tu dieta alimentos ricos en hierro y ácido fólico.